lunes, 26 de octubre de 2015

DIOGENES DE SINOPE, ANECDOTAS DEL CINISMO 4



De esta manera se llevaba con los demás habitantes de Atenas, y por esos pensamientos aunque a veces mordaces, era amado por el pueblo Ateniense.

"Los dioses han dado a los hombres una vida fácil; pero que ésta se oculta a los que van buscando dulzuras, ungüentos y cosas semejantes". Es un pensamiento concreto y facíl de comprender de Diogenes.

Muy coherente con el resto de su filosofía, un estilo de vida sencillo lleva consigo felicidad y facilidad para vivir, pero las personas que se afanan por conseguir estas dos cosas a menudo complican innecesariamente su propia existencia y la de los demás, y como resultado obtienen todo lo contrario, una vida complicada y llena de amarguras.

¡SAPERE AUDE!

viernes, 23 de octubre de 2015

POEMA ONTOLOGICO 2


En este post analizaré los fragmentos 2 y 3 del poema ontológico de Parménides. De acuerdo a la división del texto de la que hablaba en el post anterior estaríamos dando inicio a "la vía de la verdad".

El poema dice así:
"FRAGMENTO 2
Pues bien, yo te diré -cuida tu de la palabra escuchada las únicas vías de indagación que se echan de ver.
La primera, que es y que no es posible no ser, de persuasión es sendero (pues a la verdad sigue).
La otra, que no es y que es necesario no ser,un sendero, te digo, enteramente impracticable. Pues no conocerías lo no ente (no es hacedero) ni decirlo podrías en palabras.
FRAGMENTO 3
...pues lo mismo es inteligir y ser."
El fragmento 2, de entrada resulta algo confuso. En contexto Parménides se encuentra hablado con la Diosa Dike y ella es quien le dice tales cosas: que debe saber que existen dos caminos para la investigación, el camino del SER y el camino del NO SER.

Como explicaba en el post anterior, para los filósofos presocráticos incluyendo a Parménides, la naturaleza y en general el cosmos tenía una organización, con un principio y un fin, y esto les llevó a concluír que ese principio fundamental del que se constituye todo y que implica un fin (un propósito) para todo lo existente al cuál llamaron "PHYSIS" tenía en sí una esencia, un transfondo, una razón de SER.

Desde ahí inicia Parménides.

El primer camino es el que corresponde a la verdad, el segundo no, porque no es posible (no es hacedero) tanto que nisiquiera se puede hablar de eso. No se puede hablar de lo que no es porque ¿Qué vamos a decir de eso?

En el contexto de la Grecia Antigua esto es totalmente sensato, inclusive hoy en día, sin embargo en el siglo XX el filósofo Alemán Martín Heidegger plantea unas preguntas muy interesantes al respecto como por ejemplo "¿por qué el SER y no más bien la NADA?" pero eso lo dejaremos para otro post.

Finalmente en el tercer fragmento explicará su postura filosófica afirmando que lo mismo es inteligir y ser. Inteligir es conocer.

Quiero cerrar este post con el famoso momento del Tercer Acto de Hamlet:

"Hamlet
Ser, o no ser, ésa es la cuestión. ¿Cuál es más digna acción del ánimo, sufrir los tiros penetrantes de la fortuna injusta, u oponer los brazos a este torrente de calamidades, y darlas fin con atrevida resistencia? Morir es dormir. ¿No más? ¿Y por un sueño, diremos, las aflicciones se acabaron y los dolores sin número, patrimonio de nuestra débil naturaleza?... Este es un término que deberíamos solicitar con ansia. Morir es dormir... y tal vez soñar."
SER ó NO SER, lo segundo sería como morir ó dormir y entonces soñar, es decir, sumergirse en la fantasia, en las ilusiones, en lo aparente.

miércoles, 21 de octubre de 2015

POEMA ONTOLOGICO 1


Lo prometido es deuda, hoy traigo la primera entrega de un análisis acerca del Poema ontológico del filosofo griego Parménides. 

El poema es dividido en varias partes por estudiosos de la filosofía a saber: proemio, a de la verdad, a de la doxa.  La doxa es una expresión griega que hace referencia a la simple opinión sin un argumento solido que la sustente, también hace alusión a lo que es aparente. 

Yo llevaré un camino y un ritmo en el análisis un poco distinto a lo tradicional con el ánimo de hacerlo más comprensible y crear la posibilidad de nuevas interpretaciones y así enriquecer el pensamiento filosófico. 

Empezaré con el fragmento 1 que dice: 
"FRAGMENTO 1 Los corceles me arrastran, tan lejos como el ánimo anhele llevaron. Y una vez que en el renombrado camino de la Diosa me hubieron puesto, que lleva al varón sapiente a través de los poblados, por allí me condujeron. Por allí me llevaban los hábiles corceles tirando del carruaje; las doncellas indicaban el camino. En los cubos del eje con estridente sonido rechinaban ardiendo (acelerado por dos vertiginosas ruedas, de ambos lados) cuando se apresuraban a escoltar las doncellas Helíadas, abandonadas ya las moradas de la noche hacia la luz, habiendo con sus manos los velos de la cabeza retirado.  Allí están las puestas de los senderos de la noche y del día y en torno a ellas, dintel y umbral de piedra, las mismas, etéreas, cerradas por inmensas batientes hojas de las que Dike, la de los múltiples castigos, las llaves guarda de doble uso. Le hablaron las doncellas con blandas palabras y sabiamente persuadieron a que el enclavijado cerrojo prontamente de las puertas les quitase. Y éstas de la entrada el inmenso abismo produjeron al abrirse. Los broncíneos postes en sus goznes uno tras otro giraron de clavijas y pernos guarnecidos. Y a través de las puertas, derecho por el camino, carro y caballos las doncellas condujeron. Y la diosa benevolente me recibió; con su mano mi mano derecha cogiendo, con estas palabras a mi se dirigió:  "Mancebo, de auriga inmortales compañero, que con sus caballos que te traen , a nuestra morada llegas,  salud!, que no una mala moira te envió a seguir este camino (pues fuera del sendero de los humanos está), sino Themis y Dike. Y así tendrás todo que averiguar, tanto de la bien redonda verdad el corazón imperturbable como de los mortales los pareceres en los que verdadera fidelidad no hay, y aprenderás también esto: cómo lo múltiple pareciente tenía que hacerse aceptable, penetrándolo todo por todas partes."  

Lo primero que salta a la vista es que Parménides recurre al texto literario como herramienta para expresar su pensamiento filosófico. Esto es algo que se mantendrá a lo largo de la historia de la filosofía, por ejemplo finalizando el siglo XIX de nuestra era Nietzsche utilizará este recurso con "Así habló Zaratustra". 

Pero no es solo por la dificultad de expresar con claridad lo profundo y complejo del pensamiento que se recurre a la literatura. En la época de Parménides se estaba dando inicio a la filosofía cuando los sabios (como los llama Aristóteles) estaban dejando de lado el pensamiento mítico para iniciar el camino del pensamiento científico. De esto ya he hablado en la serie "La escuela de Atenas" (ver en videoblog "la escuela de Atenas 3"). 

Iniciando, Parménides se ve a sí mismo viajando a gran velocidad, tan lejos que ya no se encuentra en esta dimensión. Y allí se encuentra con las hijas del Dios Sol (Helios) que lo van acompañando, y lo van alejando de la noche y de la oscuridad. Metafóricamente hablando él se refiere a dejar atrás la oscuridad de la ignorancia y acercarse a la luz del saber. 

Finalmente se detienen en la puerta de la Diosa Dike (Diosa de la justicia, que vigilaba las acciones de los hombres y odiaba la falsedad) en medio del día y de la noche que representan la luz y la oscuridad. La Diosa lo recibe con alegría diciéndole que no ha sido una mala moira, es decir, un mal giro del destino el hecho de que él se encuentre allí pues ha sido ella y la Diosa Temis (quien era la encarnación del consejo divino y de las buenas costumbres) quienes lo han llamado, por lo que debe disponerse a aprender todo lo que vea. 

Todas estas consideraciones están dadas para que el lector disponga de todas su atención, no con el ánimo de encontrar defectos en la argumentación, sino con el propósito de entender la visión del filosofo acerca de la Physis y aún más, del SER. 

¡SAPERE AUDE!

sábado, 17 de octubre de 2015

DIOGENES DE SINOPE, ANECDOTAS DEL CINISMO 3



Diogenes nuevamente hace gala de su rapidez mental y de la tremenda coherencia entre su inusual comportamiento y su pensamiento. Él era indigente, habitaba las calles, vivía en un barril, comía solo lo que podía llevar en su bolso; sin embargo su estilo de vida era el testimonio vivo de su forma de pensar: "se puede ser feliz en la vida viviendo de la manera más sencilla posible".

Con su respuesta Diogenes demuestra qué estaba muy conciente de quien era él, de su lugar en la sociedad y sobretodo de quienes eran los otros.

La lección de hoy es sobre autoestima y seguridad en uno mismo, algo que las personas buscan tanto en esta sociedad cada vez más superficial, cada vez más vanal, cada vez virtual.

martes, 13 de octubre de 2015

DIOGENES DE SINOPE, ANECDOTAS DEL CINISMO 2


Diogenes dirige sus críticas a la sociedad en este caso no contra la oración o contra la espiritualidad de las personas.

Como siempre su objetivo es atacar la desviación que él veía en su momento (y qué seguramente hoy todavía existe) del ser humano sobre las prioridades la importancia que le da a unas cosas sobre otras, pues a su modo de ver, cada persona tiene en sí misma todo lo que necesita para ser feliz.

De ahí su siguiente crítica a las personas que tienen un horizonte desenfocado en la vida, pues sus ojos y su mente están en lo que pasa en su percepción de la vida la cuál es alejada de la realidad, por eso dice "en sus sueños", en lugar de hacer un acto de conciencia y hacerse sensibles en lo que conllevan sus acciones.

¡SAPERE AUDE!

sábado, 10 de octubre de 2015

DIOGENES DE SINOPE, ANECDOTAS DEL CINISMO 1




Es bueno estar de regreso en el blog. He estado ocupado con las responsabilidades de la escuela en la que trabajo y demás situaciones que exigian mucho tiempo.

Desde hace tiempo he querido hacer un recuento de las anecdotas de Diogenes de Sinope, quien es uno de los filosofos más importantes de la Antigua Grecia y pertencía a la corriente filosófica llamada "Cinismo". Aunque yo no me considero a mi mismo cínico en el amplio sentido de la palabra, me parecen muy interesantes y prácticos para aplicar en la vida diaria los planteamientos de Diogenes.

Sin más, esta es la primera anecdota.

En el mercado Ateniense Diogenes decía:
" Que las cosas mejores se venden por muy poco precio, y al contrario, pues una estatua se vende por tres mil dracmas, y un quénice de harina no más que por dos dineros"

Esta afirmación deja en claro cual era el orden de importancia que le daba a las cosas este filósofo, y al mismo tiempo es una interrogante hacía la sociedad y a todas las personas acerca de lo mismo, ¿Qué valor es el que le damos a las cosas? Especialmente en nuestros países latinoaméricanos dónde la volatilidad del dolar (una moneda que nisiquiera es la nuestra) ha golpeado tanto la economía dejando una gran debastación a su paso.

¡SAPERE AUDE!